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Lugarín que estuvo habitado en tiempos y que fue abandonado (dicen) por una epidemia de viruela. Tras la Guerra Civil se quemaron varias de sus casas para que no sirvieran de refugio a los maquis, y después ha sido utilizado como braña. Siguiendo pista arriba se pasa por varias cabañas, algunas acompañadas de buenos tejos.Se llega desde Tolivia, Laviana.
A veces se oyen voces (a)típicas cargadas de tópicos para tratar heridas que se vuelven atópicas y se colocan donde, en realidad, se pretendían erradicar otros problemas; fomentado así la leyenda de lugar maldito y desde esa ignorancia general evitar nuevas reuniones alrededor de los mismos topos...
ResponderEliminarCada nueva fotografía refleja el encanto de cada lugar que recorres y, siendo suficientes con las que pones, se deja a la imaginación por donde atrochas o subes.
Salud, Libertad y Monte.
Quizá lugares y caminos solo sean catalizadores para conseguir ese agridulce precipitado, la melancolía de los días que pasan, que dijo don Franco B. italiano. Gracias por la visita.
ResponderEliminar¿Franco B. italiano...Algún artista?
ResponderEliminarDígame quién...ruégase; lo desconozco
Battiato, por supuesto. Tiene su gracia, y su letrista, el filósofo Sgalambro, que también se anima a cantar, también.
ResponderEliminarSaludos
Eso está mejor, ya de algo me sonaba esa estrofa.
EliminarAmbos geniales, tanto uno como el otro y en sus aforismos se pueden
interpretar el acierto real de la vida; no el imaginado, aunque a veces anhelado
Lo suelo llevar en el ipod de viaje.
Buen viaje por esas majadas y brañas
Salud, Libertad y Monte